Ascensión desde el pueblo de Balboa, en la parte leonesa, a uno de los picos más elevados de Os Ancares, Penarrubia, desde donde son visibles también en el cordal de la Sierra de Os Ancares los picos: Mustallar, Cuiña y Tres Obispos. Una ascensión continúa con desniveles que alcanzan en grandes tramos máximos del 30%. 10 kms de subida que nos dan una visión completa de las montañas circundantes como el Courel, los montes de León y Aquilianos. Una ruta moderadamente difícil por su desnivel tanto de subida como de bajada , distancia y tiempo empleado. Lo mejor el paisaje natural.
No es posible encontrar una comarca más singular y diferente que la comarca de Os Ancares, situada en la frontera entre Galicia y León. La vida en ella transcurre vinculada inseparablemente al difícil y frondoso territorio que la define, con fuertes pendientes y una riqueza forestal sin igual, salpicado de infinidad de cientos de pequeños núcleos de población, más concentrados en la zonas montañosas y más extensos a medida que se suaviza la orografía; todos ellos próximos, cómo no, a las áreas de aprovechamiento agrícola y de silvicultura. Las cumbres míticas para la memoria de los aficionados gallegos y leoneses al montañismo, los valles amplios con paisajes revitalizadores, surcados por ríos y riachuelos en constante sinfonía, la arquitectura popular, los restos históricos, las escenas y el ritmo de la vida rural hacen de Ancares no sólo una reserva natural, sino un espacio para experimentar el valor de lo auténtico.
La comarca de los Ancares está situada entre las provincias de Lugo y León. Se trata de una frontera política y natural entre Galicia y la cuenca de El Bierzo.
Esta zona fue habitada por las tribus celtas que se refugiaron en las montañas huyendo del empuje de las legiones romanas. Vestigios de las luchas entre el Imperio Romano y los primitivos pobladores de estas tierras son la multitud de castros que aparecen en zonas altas salpicando la orografía de los Ancares.
La lejanía de las grandes urbes unida a lo intrincado de sus valles ha favorecido un aislamiento secular que ha permitido la supervivencia de unas tradiciones y de una arquitectura popular que casi han desaparecido en otras zonas del Norte de España. Las expresiones de arquitectura popular más características son las pallozas y los hórreos.
BalboaTramo de gran desnivelPenarrubiaCima PenarrubiaRefugio MosqueiroCantejeiraPalloza en BalboaCima Penarrubia y cimas Ancares
Distancia 23,73 km. Desnivel positivo 1.220 m. Dificultad técnica Moderado. Altitud máxima 1.824 m
Espectacular ruta de montaña que discurre hasta el Valle del Silencio, uno de los enclaves naturales más hermosos del Bierzo, un lugar de gran aislamiento y con espectaculares paisajes. San Genadio, San Fructuoso o San Valerio aquí se aposentaron hace más de mil años buscando un lugar de meditación aislado y lejos del ruido del mundo, fundando numerosas iglesias y monasterios .
Partiendo de la hermosa aldea tradicional de San Cristóbal de Valdueza, , descendemos al valle por un sendero de fuerte desnivel que nos conduce a la preciosa aldea de Manzanedo de Valdueza. Salimos por la senda que cruza el enorme castañar de Manzanedo, impresionante bosque de castaños, de gran extensión, que rodea totalmente el valle donde se encuentra la aldea. La senda continua a Peñalva, antes visitamos las ruinas de la ermita de Sta. María de los Escavos. El sendero continua y nos ofrece lejanas vistas del pueblo de Montes de Valdueza y de los picos que con más de 2.000 metros conforman un grandioso espacio natural
Después de este tramo, alcanzaremos la preciosa aldea de Peñalba de Santiago, declarada conjunto histórico artístico en 1976 y declarado uno de los pueblos más bonitos de España, totalmente restaurado y con una de las escasas joyas mozárabes de la península: la iglesia de Peñalba, del siglo X, La aldea está enclavada en la base de los Montes Aquilianos.
Desde la aldea nos dirigiremos para ver la cueva de San Genadio, lugar de meditación del monje durante largos períodos en busca de tranquilidad y el silencio. Regresamos de nuevo a Peñalva y continuamos por una pista amplia hasta tomar el antiguo camino a San Cristóbal, un primer tramo de fuerte desnivel para ir poco a poco suavizándose, pequeñas carballeiras dispersas nos dan sombra hasta alcanzar los 1.400 metros desde donde contemplamos un grandioso panorama de los picos de más de 2.000 metros y posteriormente la gran llanura del Bierzo con Ponferrada como referencia
Regresamos de nuevo a San Cristóbal, fin de esta ruta por uno de los lugares más bellos de todo el Bierzo.
Manzanedo de ValduezaBosque de CastañosErmitaPeñalvaValle del SilencioCueva de San GenadioLa Cruz del Pico y Valle del SilencioPico el Tuerto y Montes de ValduezaMontes de ValduezaEl BierzoSan Cristobal
Dejamos para el final de nuestra estancia en Riaño el extenso bosque de Hormas, en principio habíamos pensado conocerlo en toda su extensión pero descubrimos que el pico Pandián con sus 2010 podria ser el mejor epílogo de nuestras rutas. Y a buen seguro así fue, la caminata por el extensísimo bosque de robles centenarios con amplios prados en donde se pueden ver corzos, jabalíes, caballos asturcones, rebecos, buitres y por supuesto ganado vacuno y lanar, nos llevó hasta la fuente natural que aquí nace y se ubica en la base de la subida hasta el Pandíán. No hay senda señalizada y la espesa vegetación en la parte baja complica y dificulta mucho la ascensión, hay que tomárselo con calma y de vez en cuando girarse a contemplar las vistas sobre las montañas de Riaño y el embalse que anegó uno de los valles más bellos del norte, nos preguntamos con pena como sería hoy esta comarca en su aspecto natural. Siete pueblos fueron anegados y se perdió una gran riqueza natural, algunos políticos de la época no se como duermen por la noches sin pesadillas. Culminamos la subida en el vértice geodésico que nos indica los 2.009 metros sobre el nivel del mar. Que decir de la espectacular vista en 360 grados : Picos de Europa, Montañas de Riaño, Bosques, embalse y la cercana montaña Palentina. Retornamos por la línea de cresta siempre sobre los 1.900 metros hasta la Requejada, nos desviamos hacia el valle siguiendo tramos abiertos, caminos de agua y pedreras sin nada definido hasta la zona próxima al bosque en donde de vez en cuando aparecen hitos que nos hacen pensar que vamos en la buena dirección. Nos adentramos en el profundo bosque, robles centenarios nos acompañan por un sendero más o menos intuido hasta lo más profundo en donde siguiendo el arroyo aparecen de nuevo los hitos que ahora sí nos llevan hasta el refugio de Osil. Se abre una pista amplia que da acceso a los prados en donde pasta el ganado, nos quedan ya los últimos 4 kms para poner punto final a esta ruta fantástica. Ruta difícil desde la fuente hasta el Pico y la bajada hasta el bosque en la vuelta. Lo mejor, sin duda las vistas desde el Pandián. Imprescindible GPS.